La papaya que da Jorge Enrique Robledo incumpliendo la normatividad en publicidad electoral
La propaganda electoral sin duda se convierte en uno de los pilares de los movimientos y partidos políticos, no era para menos, hoy con la evolución de la tecnología la publicidad ha tenido grandes avances, variar entre volantes a tweets o posts de Facebook.
La ley 30 de 1994 estableció que los partidos, movimientos y candidatos
a cargos de elección popular podrán hacer divulgación política y propaganda
electoral por los medios de comunicación. Lo cierto es que se ha prohibido la publicidad a través de afiches,
pasacalles y pendones en espacio público y/o en paraderos de buses. No
se permite más de un aviso por sede política, ni anuncios en
carrovallas o motovallas, ni la propaganda política a través de vallas o
pantallas electrónicas.
Pero la prohibición "no ha pegado" en muchos partidos políticos pues el común denominador son postes, puentes peatonales y vehiculares, armarios telefónicos,
bancas de los parques, monumentos históricos y troncos de los
árboles. Para las elecciones del 19 de Abril pareciera que un poster amarillo y negro se tomara cientos de postes.
El POLO no se entrega, y la única forma de no entregarlo es dando brincos a las regulaciones sobre publicidad exterior, esta foto tomada de un Retweet de la cuenta del senador Jorge Enrique Robledo muestra lo que ya es conocido, no es la primera vez, en las elecciones de Congreso en el 2014, ya Claudia López denunciaba dicha situación:
Tengo gran aprecio por el Senador Robledo, pero todo el frente de mi casa y por donde paso en la ciudad están sus afiches en postes #mal
— Claudia López (@CLOPEZanalista) febrero 8, 2014
Sí señora @ismene2 son más baratos, pero @JERobledo no está por encima de la Ley. Se pegan en ventanas no haciendo basura en postes y calles
— Claudia López (@CLOPEZanalista) febrero 8, 2014
Las respuestas del POLO, militantes y lideres, aunque ninguna de manera oficial por parte de los directivos o el mismo Senador Robledo, es que dicha publicidad es más económica, a pesar de que campañas pasadas de Robledo han reportado gastos de 1.015.314.284, considerandolas, según el Tiempo como la más cara al Senado, y que la estrategia de prohibir que la ciudad se ensucie con este tipo de publicidad pareciera venir del "imperio" o las "esferas del gran poder". Lo cierto es que es prohibido sobre la infraestructura, tales como postes de apoyo a las redes eléctricas y telefónicas, puentes, torres eléctricas y cualquier otra estructura de propiedad del Estado y más cierto aún que nunca vuelve a limpiar dichos lugares, según una encuesta realizada por Cifras y Conceptos más del 26% de las personas encuestadas siente que posters en las vías generan una alta afectación negativa a la ciudad y el medio ambiente.
Las multas estipuladas por el Consejo Nacional Electoral van -de manera
inicial- de trece a 130 millones de pesos. Y después entre mil y 2.500
salarios mínimos vigentes. ¿Papaya servida, papaya partida?

